Desde el Desierto

Desde el Desierto son muchas cosas a la vez, un diario, un lugar donde poner ideas, donde recomendar musica, libros, películas. Y todo ello con la ambiguedad de ser personal y público a la vez.

miércoles, agosto 17, 2005

La joven de las rosas.

Hoy salía de la tienda de fotografía, despues de hablar con mi novia por teléfono he arrancado el coche y cuando ya estaba en marcha he tenido que casi parar porque un grupo de turistas alemanes iba caminando por el centro de la carretera. Parece que no se limitan con comprar media isla, ahora tambien quieren caminar por donde les salga de las narices. Despues de esperar pacientemente a que se dieran cuenta de que un coche con las luces encendidas les seguía muy de cerca y se apartaran con cara de sorpresa he seguido mi camino. A los pocos metros había un paso de peatones y como es normal en el municipio donde me encontraba habían muchos turistas esperando pasar. Y paré.

Pero no paré para que los turistas pasaran, paré porque vi a una "chinita" vendedora de rosas esperando para cruzar. Paré por ella. El resto de personas, turistas con piel de cangrejo por no saber tomar el sol, esperaban como corredores en la linea de salida, esperaban que me paraba para cruzar el paso de peatones, para continuar con un caminar que para ellos parecía imposible de detener. Pero la vendedora de rosas no era como ellos. Ella no. Ella esperaba tranquila a que algún coche se detuviera, y a diferencia del resto me miraba directamente a mi, a los ojos. Me cautivó esa mirada tan tranquila y amable.

Paré el coche y le sonreí, tan dulcemente como fui capaz y acentí con la cabeza, como diciéndole: pasa... porfavor. Y ella, o dios... ella: sonrió, asintió con la cabeza, y mientras cruzó el paso de peatones no dejó de sonreir y de darme las gracias... a pesar de que yo no podía oirla.

Se que es un hecho sin importancia, y que tal vez no merezca un post. Pero tenia que comunicarlo, transmitir esto, a quien sea!.