Cielo sobre Berlín

Es muy tarde y el ssh me acaba de volver a dejar tirado. Tenia esta noche para terminar la práctica e intentar llorarle mañana un poco al profe para que me dejara entregarsela... pero el ssh no va. Y ahora, en el caso de que mañana este arreglado, me queda menos de medio día para terminarla.

Cuando el niño era niño...

Cuando tienes algo en mente, una meta inmediata, y te van poniendo pegas, una tras otra, nunca ves la posibilidad de que esa meta no se consiga, siempre sigues luchando, porque esa meta es la Meta. Pero... el número de pegas y de trabas llega a tal número ahora mismo que saboreo la posibilidad de mandar la práctica a la mierda, mandar al profe a la mierda y tomarme al menos un día de relax, sin agobios.

Cuando el niño era niño...

Debería acostarme para levantarme temprano y esperar el milagro de que la red esta funcionando, debería... pero deseo otra cosa. A estas horas me apetece ver Cielo sobre Berlín... dejarme llevar por las palabras del ángel.. oir sus "Cuando el niño era niño..." que me encantan, oir esa música, tan simple, tan minimalista, incluso triste a veces. Su música me recuerda a la banda sonora de la película Avalon, del director japonés Mamuro Oshi. La banda sonora era del compositor también japonés Kenji Kawai. Me gustan los acordes vocales tan largos que usa... atmósferas cálidas y dulces, donde uno puede perderse y encontrarse... En la película de Wim Wenders ocurre lo mismo con la música, en ocasiones son prácticamentes iguales y al oirla en esta peli una sensación de familiaridad, mejor aún, de hogar me embriaga. Desearía retener para siempre esos acordes en mi mente... sería como un caracol, con su hogar a cuestas siempre, nunca echaría mi Lugar de menos.

Cuando el niño era niño...

Estoy cansado de buscar mi Lugar y de verlo en la música o en las ideas y ser incapaz de retener todo eso en mi mente... todo es fugáz.

Es bueno tener claro que lo que las personas te dan es también fugáz, si alguien te da algo bueno, lo que sea, nunca pienses que eso se repetirá, jamás lo pienses. Porque si esperas que se repita sufrirás al no encontrarlo en el futuro o si se repite será algo esperado y no te sorprenderá. Lo mejor es no esperar nada y vivir cada momento bueno como si fuera la última vez que eso sucederá. Así vivirás la vida mas intensamente y nunca dejarás de sorprenderte.

Cuando el niño era niño...

Hay una peli que me gusta mucho por muchos motivos, se llama Mas Allá de Rangoon, y en ella uno de los protagonistas me inculcó esto último que acabo de decir al hablar de la religión budista. Él decía (más o menos): "La vida esta llena de tristezas y los momentos de felicidad son muy escasos, por eso cada vez que un momento de felicidad sucede debes alegrarte y vivirlo plenamente, porque es un regalo muy valioso y escaso." Se que sus palabras fueron mucho mejores que las mias pero bueno... cómo decía una profe mia de hace bastantes años: "Lo importante es el concepto".

Cuando el niño era niño...